Te guste o no alguien te está mencionando en Internet.
Tanto para empresas o individuos la reputación web ha tomado gran importancia en los últimos años.
Cerca del 80% de las personas, ante el interés por un producto o persona, lo primero que hacen es buscarlo en Google o en redes sociales.
Los resultados que encuentren van a determinar su opinión.
Muchos creen su imagen online depende solo de su sitio web, o su blog, pero el alcance es mucho mayor.
Los siguientes son solo algunos de factores que afecta tu reputación:
- Comentarios uno hace en Social Media
- Imágenes que publiques en sitios como Flickr o Facebook
- Videos que compartas en YouTube
- Artículo que publiques en otros sitios bajo tu nombre
- Comentarios que dejes en blogs o foros
- Geolocalización, al usar aplicaciones como Foursquare
- Comentarios que hagan sobre vos en cualquiera de los lugares mencionados anteriormente
- Imágenes tuyas publicadas por otras personas
Como regla general cualquier acción que tomes online puede ser usada en tu contra, y tienes que estar preparado.
¿Cómo cuido mi reputación?
Para empezar, no podés ignorar lo que pasa en Internet.
El primer paso es aceptar la situación, y ver que están diciendo sobre ti o tu empresa. Una simple búsqueda en Google te dará una primera vista sobre la impresión que tenés sobre el mundo.
El siguiente, es saber que podés controlar. Hay muchos aspectos de tu reputación sobre los que uno tiene control directo. Es tu deber asegurarte que muestren solo elementos que te beneficien.
Tus perfiles sociales deben ser lo más completos posible, brindando toda la información que alguien pueda necesitar, de esta forma se evita que la busque en otro lugar, donde uno no maneja el contenido.
Algo muy importante a tener en cuenta es que todo lo que uno pública debe poder superar la prueba del tiempo. Un comentario realizado hace 10 años puede volver a perjudicarte y cada vez que uno realiza una publicación debe pensar el efecto que puede llegar a tener en el futuro.
Hay que ser proactivo y anticiparse a los problemas que puedan surgir y reaccionar rápidamente ante los que no viste venir. Cada situación que parece perjudicial para tu imagen puede transformarse en una experiencia positiva.
Escuchar lo que la gente tiene que decir sobre ti es esencial para conseguir un cliente satisfecho.
No hay nada mejor que un cliente satisfecho para defender tu reputación. Construir una base de fans y cuidarlos es clave para mantener tu imagen. Ellos se ocuparan de defenderte y presentar contenido que te beneficie hasta en los rincones más ocultos de Internet.
Mantener y mejorar tu reputación online es un trabajo difícil y constante. Sin embargo los beneficios que trae hacen que valga la pena el trabajo.
Como siempre dejamos a su disposición los comentarios para cualquier consulta que tengan acerca del tema.
Y si tienes inconvenientes con tu reputación web no dudes en contactarnos para resolver tu situación!
